jueves, 1 de octubre de 2009

MACROREGLAS

ESTIMADOS ALUMNOS DEL GRUPO 1AM Y 1BM.
Espero se encuentren bien, con ánimo de seguir trabajando como lo hemos venido realizando en esta aventura, me pernito dar a conocer a ustedes la tercera macro regla del resumen y es la de: INTEGRACIÓN – RECONSTRUCIÓN.
La cual consiste en agregar a lo fundamental (esto es, lo que obtuvieron al leer párrafo por párrafo y tomar de allí la idea principal), lo que surgió de las otras dos macro reglas con la modificaciones ortográficas y sintácticas necesarias.
ACTIVIDADES:
1.- Aplicando las macroreglas, realiza el resumen correspondiente, siguiendo los pasos de la lectura de comprensión.
2-. Después de realizar la lectura de comprensión que título le darías al presente texto.
3-.dicha actividad la realizaran en la libreta de apuntes.
4-. Actividad para:
RODRIGUEZ DEL REY YOLANDA DEL GRUPO 1BM.
MURATAYA ISLAS NIDIA LAURA DEL GRUPO 1AM.

- Copiar dicha información en archivo (memoria USB) en Word 97-2003).
- Solicitar para el día lunes aula didáctica de favor.

Entre los caracteres físicos que contribuyen más a hacer que una persona resulte atrayente (o repulsiva) hay algunos que son incontrolables a causa de su predeterminación (forma del cuerpo, estatura, color y contextura de los cabellos, regularidad y blancura de los dientes) o por su relación con hechos que son independientes de la voluntad de los sujetos a quienes afectan (diversos ataques a la integridad corporal por efecto de enfermedades, accidentes, etc.). Pero la mayor parte de los atributos físicos que definen nuestro aspecto son modificables voluntariamente. El cuerpo puede ser ensanchado o afinado mediante la combinación de formas y colores de la ropa, puede parecer más alto mediante el uso de tacones altos, puede parecer rejuvenecido mediante hábiles aplicaciones de tinturas o prótesis. En el siglo XX se lleva a cabo una considerable manipulación de nuestra apariencia. Lo que distingue a nuestra época de las anteriores no es tanto la diversidad de las intervenciones practicadas en el cuerpo, como su finalidad casi exclusivamente estética: una presentación (o representación) atractiva y halagadora de uno mismo está hoy tan recompensada y un aspecto poco agraciado es tan castigado socialmente que las metamorfosis corporales actuales están dedicadas casi exclusivamente al embellecimiento.

Las transformaciones del cuerpo son aloplásticas cuando se deben a objetos y materiales exteriores como las máscaras, vestidos y adornos o a artificios poco duraderos como el maquillaje, el peinado y las pinturas aplicadas al cuerpo. Estas modificaciones son las más frecuentes en nuestra cultura. En cambio, las transformaciones autoplásticas conciernen directamente al cuerpo. Fueron relativamente frecuentes en los pueblos primitivos; citemos las perforaciones (de orejas, nariz, labios, órganos genitales, dientes), en las que a veces se insertaban adornos de madera, de metal o de piedras preciosas; las deformaciones (de labios, orejas, senos, cráneo y cuello en África; de pies, en China) y las mutaciones (circuncisión, clitoridectomía). La circuncisión continúa practicándose, lo mismo que la perforación de las orejas femeninas (nuevamente de moda), pero la autoplastia del aspecto físico está hoy representada sobre todo por la cirugía estética.

¿Por qué semejantes transformaciones ? El hombre trata por medios objetivos de modificar su imagen del cuerpo. Esas metamorfosis son ellas mismas fuente de placer, en virtud de un juego permanente de extensión y retracción del cuerpo, que nos permite triunfar de nuestros límites corporales y al mismo tiempo dominar los cambios que pueden amenazar a aquél. La modificación voluntaria del aspecto físico debe considerarse como una forma de comunicación no verbal que sirve como vehículo de diversas informaciones de uno mismo y constituye un conjunto de señales que indica el grupo al que uno pertenece, la edad, el sexo, el status y el rol social, y la personalidad del que las emite. De manera que el aspecto físico de un individuo puede transmitir simultáneamente diversos mensajes. Ese cuerpo “público” y, por lo tanto, destinado a la mirada de los demás probablemente sea un indicador de los sentimientos que el individuo experimenta respecto de su cuerpo y de sí mismo y también un indicador de los sentimientos e imágenes que desea suscitar en los demás.

Podemos comprobar que la belleza es valorada en la medida en que produce emociones positivas en los demás (placer estético y/o erótico), y que la fealdad genera reacciones inversas. El individuo enfermo o amputado probablemente sea asimilable al individuo poco agraciado por cuanto suscita reacciones emocionales desagradables, según ya señalamos; en estos casos no hay sólo rechazo sino sentimientos y actitudes ambivalentes (repulsión, disgusto, miedo, lástima, curiosidad...), que dan origen a una verdadera discriminación social. Por ejemplo, una falla corporal, sobre todo si es evidente, es un estigma que marca la identidad del portador. Una apariencia corporal que no se halle estéticamente de acuerdo con las normas culturales implica un rechazo brutal y global de la persona atípica, que dispone de pocas soluciones para sobrevivir a esa exclusión. El sujeto puede minimizar o negar su deformidad a fin de “normalizarse y compensar un pérdida dramática de identidad y correlativamente alcanzar una imagen aceptable de sí mismo.


Tomado de MAISONNEUVE, Jean y BRUCHON-SCHEITZER, Marilou. “Las Modificaciones de la Apariencia: ¿Destino o designio ?” En: Modelos del Cuerpo y la Psicología Estética. Buenos Aires: Paidós, 1984. p.p.48-49.



Atte. Lic. Edgar Aguilar Martínez